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Agosto 2022
El deterioro es un área de preocupación constante para muchas entidades en el entorno económico actual. Los usuarios de la información financiera como: Reguladores e inversionistas permanecen con el foco en esta área y continúan presionando para una mayor transparencia en las revelaciones. Las Entidades que tienen montos significativos de crédito mercantil e intangibles, o aquellas que se vean afectadas en mayor medida por los impactos negativos de los diferentes factores de la economía y las operaciones mundiales como lo son: el Covid-19, el cambio climático, la actual invasión rusa, la alta inflación y el aumento de las tasas de interés, tienen un mayor riesgo al momento de sustentar y documentar sus evaluaciones y pruebas de deterioro de los activos no financieros de acuerdo con las guías de la IAS 36 “Deterioro de activos” (IAS 36), y esto en algunos casos acompañado de un desafío del regulador al revisar sus reportes financieros y cuestionar las evaluaciones de deterioro y en particular las revelaciones relacionadas.
Una evaluación de deterioro incluye la aplicación del juicio profesional, y la preparación de la evidencia documentada como base de los cálculos.
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Juan Duque
Socio de Accounting Services Group, Oficina Nacional de Auditoría, PwC México